- Área: 40 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Alex Lafuente
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Proveedores: Naza AyD, ROCKWOOL, Rothoblaas, Viroc
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Disponía de un antiguo (y pequeño) edificio familiar al lado de su trabajo donde en la planta baja su hermana estaba al frente de un Estudio de Tatuajes y en planta primera tenían un espacio común un tanto abarrotado de vestigios familiares. Pero le faltaba un espacio para ella donde poder aislarse de todo y realizar una de sus grandes pasiones: dibujar escribiendo. ¡Ay, si pudiera tener una habitación más! Me decía. ¡Tengo un plan! Le respondí.
La solución fue bastante matemática, debido a la antigüedad de la construcción la nueva habitación tenía que pesar exactamente lo mismo que la cubierta de teja que existía. Eso nos llevó a diseñar una estructura ligera de entramado de madera que además nos facilitaba la obra porque los muros vendrían ensamblados de taller para fijarlos al forjado existente. Solo necesitábamos cortar la calle durante una semana para montar la estructura, otro factor que nos ayudaría porque la calle de acceso era estrecha.
Los trabajos previos consistirían en la demolición de la cubierta y la apertura de un hueco para la escalera que subiría a la nueva habitación. Antes de montar la estructura se colocaría la nueva escalera metiéndola con una grúa.
La obra sería liviana y duradera (para mal de los más escépticos), con un interior acogedor y diáfano, un interior que te transportaría a un espacio de inspiración. El sistema constructivo nos permitiría realizar un búnker climático entre medianeras, 14cm de lana de roca en los muros de fachada y 12cm de panel de poliestireno extruido en cubierta. Agotar la altura máxima permitida por las normas subsidiaras, le daría a la habitación unas dimensiones de silencio y calma donde el ritmo lo marcarían las vigas vistas de madera de pino. Sobre la escalera se colocaría un pieza de entramado que nos ayudaría a mantener la temperatura en la habitación e iluminar la escalera a través de un panel de policarbonato, la pieza tendría un altillo arriba donde se puede dormir, leer, almacenar, mirar…
Con un mobiliario familiar e íntimo, solo colocaría objetos personales bien seleccionados: una marioneta y un dibujo de su hermana; y algunos dibujos suyos bien enmarcados y apoyados en el suelo. Un objeto nuevo ajeno a la familia la acompañaría, un pieza de la serie Variaciones de Naza AyD, se uniría a esta muestra de objetos hechos por mujeres.
A la calle, una fachada pálida de paneles de madera-cemento se integraría con la paleta de colores del entorno. Así fue como ideamos el plan, un plan para construir escribiendo.
